¿Sabías que, cada semana, te comes una tarjeta de crédito? Aunque no lo creas, es así. Se calcula que, por culpa de los microplásticos, cada ser humano se come (literalmente) 5 gramos de plástico a la semana, según un estudio de la Universidad Newcastle de Australia. Pero, ¿qué son los microplásticos y cómo afectan a nuestra salud? Te lo contamos en este post.

Los microplásticos son diminutos trozos de plástico que contaminan el medio ambiente. Son piezas de al menos 5 milímetros de diámetro, que provienen principalmente de cosméticos, ropa, pesca, industria, plantas de tratamiento de aguas residuales, neumáticos de automóviles y camiones o desechos plásticos que utilizamos en nuestro día a día (bolsas de plástico, vasos, botellas…).

Principalmente los microplásticos se subdividen en dos tipos. Tenemos los microplásticos primarios, que se fabrican para ser usados en productos. Y, por otra parte, están los microplásticos secundarios, que se derivan del deterioro de desechos plásticos más grandes como bolsas de la compra, botellas de plástico, envoltorios, etc.

 

Qué son los microplásticos y cómo afectan a nuestra salud

 

El plástico no es biodegradable, y solo se desintegra en partes más pequeñas. De esta forma, los microplásticos son absorbidos por múltiples organismos y especies animales, especialmente marinas. Esto causa grandes problemas de contaminación en nuestros océanos, e incluso la muerte de muchas especies por la ingesta de plástico, ya que los peces no son capaces de diferenciarlo de su alimento marino.

Y no solo esto sino que, como los peces comen plástico, cuando éstos pasan a la cadena alimentaria, al final los seres humanos también acabamos comiéndonos los microplásticos que previamente se han comido los peces y no han podido digerir. De ahí que, como decíamos al principio, nos comamos 5 gramos de plástico a la semana.

Desde 1950 los seres humanos hemos producido nada menos que 8.300 millones de toneladas de plástico. Y solo se reciclan el 9% de los plásticos que se producen. La mayoría acaban en vertederos y en la Naturaleza, donde se dividen en micropartículas que contaminan el medio ambiente, dañando a la fauna marina y la silvestre.

 

Qué son los microplásticos y cómo afectan a nuestra salud

 

Para que nos hagamos una idea del impacto que tienen los microplásticos en el planeta, ahí van unas cifras demoledoras: los microplásticos que hemos producido desde que comenzó la producción a escala industrial e internacional de materiales sintéticos ya pesan lo mismo que 80 millones de ballenas azules, 1.000 millones de elefantes o 25.000 Empire State Buildings. Y ya hay más de una tonelada de plástico en el mundo por persona: 8.300 millones de toneladas de plástico, por unos 7.500 millones de seres humanos.

 

 

QUÉ SOLUCIONES EXISTEN PARA COMBATIR EL PROBLEMA DE LOS MICROPLÁSTICOS

 

Una de las principales propuestas que ha puesto sobre la mesa la comunidad internacional para solventar el problema de los microplásticos es prohibir los plásticos de un solo uso y las bolsas de plástico. También se está trabajando para obligar a los productores a limpiar y gestionar con más eficacia sus residuos tóxicos.

El Real Instituto de Tecnología de Estocolmo (Suecia) está avanzando en el desarrollo de una nueva tecnología que permitiría degradar los plásticos a través de la energía solar. Se trata de un nanorrevestimiento sometido a luz solar artificial, mediante el cual los microplásticos podrían llegar a degradarse por efecto de la luz del Sol.

 

Individualmente también hay cosas que podemos hacer: utilizar sustitutivos del plástico en nuestro día a día. Así, podemos utilizar cubiertos, platos, botellas, vasos, cepillos, etc. realizados con materiales diferentes al plástico, como por ejemplo el bambú o el acero inoxidable.

 

Y en nuestros hogares y empresas también podemos apostar por la reducción de la energía que consumimos, y por técnicas de eficiencia energética. Para ello podemos utilizar, por ejemplo, energías renovables.